Aguas de Malambo dice que nunca recibieron la obra y que su informe técnico fue para que Findeter la entregara a la Alcaldía.
“En julio de 2020, lo que entregamos fue el concepto técnico de que la PTAR, en ese momento, estaba lista para funcionar de acuerdo con los planos de la construcción. No recibimos la obra porque era obligación del Municipio”.
La afirmación la hace el gerente de Aguas de Malambo, Walther Moreno, quien alerta que la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, que tuvo un costo de 21.333 millones de pesos, sigue en “grave deterioro, a sol y sereno, y sigue siendo desvalijada”.
Audio: Concepto técnico fue sobre la obra
Y así sucedió: Tal como lo informamos el año pasado, después de dicho concepto técnico, Findeter le entregó, el 30 de septiembre, la PTAR La Milagrosa al alcalde de Malambo, Rumenigge Monsalve, pero hoy, 20 meses después, a través de inexplicables dilaciones y pretensiones injustificadas, el mandatario no la ha puesto a funcionar.
“A nosotros no nos han entregado oficialmente la Planta. No hay un documento que así lo demuestre”, enfatiza el gerente Moreno.
Audio: Malambo pretende que le den más acciones
Por esa razón, mientras el Municipio sigue siendo el principal contaminador de las dos ciénagas en su jurisdicción, Mesolandia y Malambo, en las que descarga mensualmente el equivalente a 98 piscinas olímpicas de aguas residuales domésticas, existe por parte de la Alcaldía un evidente incumplimiento del acta de recibo de la obra.
El documento, firmado por el alcalde Monsalve; el gerente del Programa de Agua y Saneamiento Básico de Findeter, Mauricio Betancourt Jurado; el interventor, Fabián Vallejo Obando, y el supervisor de Findeter, César Castro León, dice expresamente que Malambo “se obliga a conservar y mantener en perfecto estado de operación y funcionamiento” la Planta de Tratamiento, pero eso es lo que menos ha hecho el mandatario local.
El acta también dice que el Municipio está obligado a garantizar que el valor de la PTAR “no será cobrado en las tarifas a los usuarios”, pero varias fuentes consultadas sostienen que si Monsalve entrega la obra a otro concesionario, “terminaría afectando el bolsillo de cada familia”.
Por la falta de mantenimiento, en otro evidente incumplimiento del acta, la obra sufre un acelerado deterioro. Como también lo informamos en agosto del año pasado, con la aparición de ‘ballenas’ por fisuras en la geomembrana, expertos en este tipo de plantas documentaron 52 hallazgos por daños y fallas. El informe fue elaborado cuando se pensó que, por fin, Monsalve la iba a poner a funcionar, pero nada resultó cierto.
En medio de este escenario de ineficiencia e incapacidad administrativa, de los 52 hallazgos identificados, la Unión Temporal Malambo, constructor de la obra, pese a que había entregado la PTAR a satisfacción a Findeter, accedió a hacer unas reparaciones que le pidieron; Aguas de Malambo dice que está lista para asumir lo que le toque si es que ellos operan la planta, pero la Alcaldía no ha hecho o no ha terminado los trabajos a los que se comprometió porque, al parecer, incumplió los pagos al contratista.
La parálisis de lo que le toca hacer a la Alcaldía quedó evidenciada hace mes y medio durante una visita de funcionarios de la Contraloría General a la planta de tratamiento.
Reparar esos daños costaba hace nueve meses cerca de 400 millones de pesos, hoy por el deterioro que ha seguido y los robos permanentes, como el de todo el sistema eléctrico, ya suman cerca de 700 millones. Como van las cosas, la PTAR pasará de tener ‘ballenas’ en su interior a ser otro elefante blanco, producto de la negligencia administrativa municipal.